Comienzo de una nueva etapa


Con la celebración el pasado 5 de marzo del XXVII Consejo Sindical Autonómico, en el que Andrés Cebrián fue reelegido presidente, comienza una nueva etapa en ANPE-Madrid.

En dicho Consejo Sindical se aprobaron las medidas adoptadas por el sindicato durante el periodo 2018-2022, y se renovaron los cargos directivos de la Organización que desempeñarán sus funciones durante los próximos cuatro años: Secretariado Permanente, vocales del Comité Ejecutivo Autonómico, delegados del Consejo Sindical Estatal, delegados del Congreso Sindical y miembros del Comité de Garantías y Derechos.

El compromiso de ANPE con la defensa de la enseñanza pública y de su profesorado es firme, y por ello, trabajará incansablemente en este nuevo mandato que recién inicia su camino.

El desarrollo de la LOMLOE dibuja un horizonte incierto y nada prometedor. Nueva ley y, de nuevo, se rebajan los contenidos, se flexibilizan los criterios de promoción y titulación, y se aparta de la escuela todo aquello que tenga que ver con el mérito, el esfuerzo, la excelencia, el estudio o el uso de la memoria. Eso sí, se incorporan nuevos conceptos, cara a la galería, como la “perspectiva de género” o el “sentido socioafectivo” en prácticamente todas las materias.

Nuevamente, se ha utilizado la educación para la confrontación política, dejándonos a nosotros, los docentes, en medio, obligados a aplicar una ley sobre la cual no se nos ha preguntado, que no nos gusta y sabemos que no es lo que necesita el sistema educativo.

Lamentablemente, será la enseñanza pública la más perjudicada, así como el prestigio de la profesión docente, porque cuando dentro de unos años los resultados y los indicadores nacionales e internacionales pongan en evidencia las deficiencias de esta reforma, todos los males volverán, de manera injusta, a achacarse al profesorado, en general, y a su formación, en particular.

Nuevamente, se ha utilizado la educación para la confrontación política, dejándonos a nosotros, los docentes, en medio, teniendo que aplicar una ley sobre la cual no se nos ha preguntado, que no nos gusta y que sabemos que no es lo que necesita el sistema educativo

Es necesario dignificar la profesión docente y situar al profesorado en el lugar que le corresponde.

Cierto es que la Comunidad de Madrid está tratando de paliar los efectos nocivos de la LOMLOE, pero poco puede hacer en el ejercicio de sus competencias, al margen de que tampoco es conveniente que tengamos en España 17 sistemas educativos distintos, sin coordinación ni criterios comunes.

En el ámbito de la Comunidad de Madrid, estaremos atentos al desarrollo normativo y seguiremos demandando todo aquello que creamos sea de justicia y en beneficio de la enseñanza pública y sus docentes, sin olvidar nuestras históricas reivindicaciones como: la disminución de las ratios, la reducción del horario lectivo del profesorado a 23 horas en Primaria y recuperación de las 18 horas en Secundaria, la equiparación salarial con las comunidades autónomas que más cobran y la enfermería escolar en todos los centros.

En ANPE somos independientes, sin ninguna atadura política, y por tanto, nuestras reivindicaciones y propuestas son profesionales, coherentes y serias. Esto, la Administración lo sabe, lo saben los afiliados y lo saben los docentes de la Comunidad de Madrid.

Por eso crecemos y por eso aumenta, día a día, el número de afiliados a ANPE-Madrid.

Pronto tendremos que hacer frente a dos nuevas citas electorales: en diciembre las elecciones a Juntas de Personal Docente no Universitario y, previsiblemente en noviembre del próximo año, las del Comité de Empresa de Profesores de Religión. Esperemos que todo el trabajo desarrollado durante estos últimos cuatro años tenga la recompensa que merece, se vea reflejado en los resultados electorales y podamos seguir trabajando en defensa de los intereses y las condiciones sociolaborales de nuestros afiliados y del profesorado en general.